Enumera cinco cosas que se te den bien. Mi abuela paterna decía que cuando era un niño mis ojos revoloteaban entre las cosas y me quedaba como abstraído, centrado en los objetos. Quizás desde entonces la filosofía se había instaurado en mí. Después recuerdo que me gustaba fijar mi atención en lo que mis compañerosSigueSigue leyendo «¿Dones o creaciones?»